EL COLEGIO SAN FELIPE, DE PUERTO PLATA, FUE EL MEJOR DEL CARIBE.

 Por: Derissé de León

EL GENERAL GREGORIO LUPERÓN APOYÓ LA IDEA DE CREAR UN COLEGIO DONDE SE IMPLANTARAN MÉTODOS RIGUROSOS DE ENSEÑANZA PARA LOS DISTINTOS NIVELES ESCOLARES CON PROFESORES EJEMPLARES.

La Puerto Plata de mediados del siglo XIX tuvo lo que se podría considerar como “el albergue de ideas liberales” y el lugar donde la vanguardia intelectual de la época tuvo cabida tras considerar la educación como perfecta simiente de los cambios sociales.

El Colegio Municipal San Felipe de Puerto Plata fue ese lugar donde la enseñanza en valores cívicos, morales y éticos inundó las aulas, haciéndose acompañar de la dirección e instrucción de hombres cuyo esmero y disciplina formó a una generación de insignes puertoplateños en lo que devino un insólito desarrollo a la ciudad por esos años.

Desde 1871 el Colegio Municipal funcionaba en Puerto Plata pues documentos de la época hacen constar su presencia.

“Es posible que el Colegio Municipal de Puerto Plata estuviese localizado en las cercanías del Parque Central, en específico en la cuadra municipal es decir, entre la antigua gobernación y el cineteatro de Puerto Plata donde se sitúa hoy un banco comercial”, argumenta el Dr. Juan Francisco Payero Brisso, historiador de esta ciudad.

Así, fotografías muestran que dicho colegio estuvo situado en el hoy denominado “Centro Histórico de Puerto Plata”, es decir, frente al Parque Central o Independencia; donde funcionaban las principales oficinas y edificaciones municipales como el teatro, gobernación, ayuntamiento, colegio y la propia sociedad “Fe en el Porvenir”.

Es posible que la localización de este importante colegio coincidiera con esta ubicación ya que era una costumbre de los conquistadores españoles la tendencia a construir contiguamente las edificaciones que se debían a los servicios y quehaceres de la municipalidad, de manera que es probable el que el hogar del conocimiento puertoplateño estuviese allí.

Luperón y el Colegio Municipal
Un dato interesante es que, según el investigador literario Andrés Blanco Díaz, el colegio municipal debió funcionar en unas de las casas o propiedades de Gregorio Luperón, quien se identificó con la benéfica causa de brindar educación y abrigar pensamientos libertadores no sólo para el país sino para las antillas o islas hermanas como Cuba y Puerto Rico.

“Luperón conocía el estado precario de la educación dominicana y el alto nivel de analfabetismo existente. Decía que la ignorancia era la peor de las tiranías y para combatirla subsidió con un 25 por ciento todo libro en el país y creó escuelas del nivel superior.

También dictó una ley a favor de la literatura nacional”, cita el historiador y periodista Filiberto Cruz Sánchez en su libro “Historia de los Medios de Comunicación en República Dominicana”, sobre el vínculo de Gregorio Luperón con la educación nacional.

A sabiendas de que Puerto Plata se convirtió en sede del gobierno provisional de Luperón en 1879, asimismo se convirtió en una ciudad distinguida no sólo por la presidencia provisional sino por el desarrollo de la educación, prensa y de vías de comunicación, cambios ligados a las ideas progresistas del ilustre hijo Puerto Plata.

“El Colegio Municipal era dirigido por el ayuntamiento municipal con el fin de reformar la educación. Coincide en que la época luperoniana fue estelar por el hecho de tener la orientación de Hostos que en esos años vivió en Puerto Plata, además este colegio fue subvencionado por Luperón”, puntualiza el historiador e investigador puertoplateño, Germán Camarena.

Inmigrantes en el Colegio Municipal
La presencia de inmigrantes en Puerto Plata que fue notoria en los años 1800 reincidió en la existencia y desarrollo del Colegio Municipal.

Se destaca el hecho de que un cubano fuese el director del mismo y de igual forma en el ámbito del nacimiento y desarrollo de la prensa en la ciudad, se demuestra que otro inmigrante de esa isla dirigió al decano de la prensa local, el periódico “el Porvenir” producido y editado en Puerto Plata.

Esta incidencia de inmigrantes en el desenvolvimiento social de la ciudad se corresponde a los datos que arroja el Censo de Puerto Plata del Año 1871, donde 191 habitantes eran cubanos y sólo 48 eran puertorriqueños en una población total de 2,829 habitantes.

De manera que había muchas familias cubanas asentadas en el centro de la ciudad que de alguna manera estuvieron vinculadas al colegio municipal.

En tal sentido, en el censo se establece que tanto los cubanos Antonio Benítez y Correoso como Miguel Fernández de Arcila, profesor y periodista respectivamente, se radicaron en Puerto Plata, el primero dirigió el colegio municipal y el segundo fue el primer director del periódico “El Porvenir”.

Según expone Emilio Rodríguez Demorizi en su libro “Noticias de Puerto Plata”, en las páginas del referido diario en fecha de 9 de febrero de 1876, Eugenio María de Hostos publicó: “Y para festejar, asistamos al plantel de educación que cuenta más recursos para darla.

Es el Colegio del Sr. Benítez Correoso… Desde entonces nos dijimos para nosotros mismos: éste es un excelente director de inteligencias…”, haciendo alusión al colegio, a su director y a todas las particularidades que lograron su admiración por la educación que allí se impartía.

El colegio contaba con un considerable número de estudiantes y con la presencia de destacados profesores como: Federico García Copley, Ramón Emelenio Betances, Fermin Silva y Rogelio Oller, entre otros cubanos y puertorriqueños dedicados a la educación.

En sus aulas se impartían materias como: Historia Universal, Cosmografía, Analogía, Lengua Española y Aritmética.

EL INFLUJO HOSTOSIANO

Con el sólo hecho de que Hostos estuviera por cuatro ocasiones en la ciudad y manifestara su adelantada visión educativa, el colegio municipal fortaleció su sistema de enseñanza a la luz del influjo hostosiano.

Con las ideas de Hostos y de patriotas nacionales como Gregorio Luperón se abrió paso a la creación de una serie de sociedades, clubes y escuelas que defendían las ideas liberales de los antillanistas y del proceso de emancipación que se registraba en esos momentos.

La “Mirada Retrospectiva de la Diócesis de Puerto Plata y de la Catedral San Felipe” establece que: “Para 1875, Eugenio María de Hostos con sus ideas revolucionarias influye en los habitantes y asumía la redacción del periódico “Las Dos Antillas”, que luego fue cerrado, y Hostos se dedica a la educación, funda en esta ciudad la Sociedad Educativa que tenía como doctrina la moral social, y junto a Gregorio Luperón forma la “Sociedad Patriótica Liga de la Paz”.

A todo esto se suma la inauguración de una biblioteca municipal en 1881 que vino a suplir la necesidad de bibliografías que demandaban los estudiantes e intelectuales de la ciudad.

Coincidencialmente hoy día, existe el Colegio San Felipe fundado en 1966 cuyo nombre se debe al patrón espiritual de la ciudad y que así como el Colegio Municipal de 1871 ha formado generaciones de puertoplateños que han dado importancia a su pequeña patria.

Así, la presencia del Colegio Municipal San Felipe de Puerto Plata marcó una época sin precedentes en el desarrollo de la educación local y dominicana no sólo por la visión que proyectaban su director, profesores y alumnos sino por albergar las ideas liberales de insignes hombres que han marcado la historia universal.