Intentan desentrañar caso de La Mulata III en Sosúa donde desaparecieron dos cajas fuertes con 60 millones

Ultima Actualización: miércoles, 07 de agosto de 2013. Por: ANTONIO HEREDIA

A medida de que pasa el tiempo, se continúan revelando elementos que comprometen a tres generales, dos coroneles y otros quince oficiales, suboficiales y alistados de la Policía Nacional quienes figuran involucrados e un voluminoso informe de la Jefatura de la Policía, titulado “Caso: Corrupción policial de Sosúa, Puerto Plata”.

PUERTO PLATA.- (1 de 3) Casi a un año ha transcurrido luego del sangriento allanamiento que realizaron fuerzas policiales en la zona turística de Sosúa, el pasado 17 de octubre de 2012 donde fue acribillado un nacional alemán y también se produjo la misteriosa desaparición de dos cajas fuertes con más de 60 millones de pesos, joyas y otros objetos valiosos, que habrían sido sustraídas en el marco de este operativo irregular.
 
A medida de que pasa el tiempo, se continúan revelando elementos que comprometen a tres generales, dos coroneles y otros quince oficiales, suboficiales y alistados de la Policía Nacional quienes figuran involucrados e un voluminoso informe de la Jefatura de la Policía, titulado “Caso: Corrupción policial de Sosúa, Puerto Plata”, al que tuvo acceso el periódico Listín Diario en su edición de este martes donde se revelan todos los detalles del operativo el cual  no fue autorizado por los altos mandos policiales ni por el Ministerio Público de la provincia de Puerto Plata.
 
En tanto que el jefe de la Policía Nacional, mayor general Manuel Elpidio Castro Castillo, calificó esta semana de “burdo allanamiento” este presunto allanamiento donde resultó muerto a manos de agentes policiales dominicanos el ciudadano alemán Peter Ebert Demetrick y otros cuatro extranjeros heridos.
 
Originalmente se difundió la versión de que este  allanamiento al complejo turístico La Mulata III de Sosúa, fue motivado ya que allí residían varios alemanes presuntamente miembros de una secta religiosa, pero de forma imprudente la entonces jefatura del mayor general, José Armando Polanco Gómez, informó que el extranjero Peter Ebert Demetrick supuestamente murió en un enfrentamiento con los agentes policiales.
 
En ese momento, el propio jerarca policial Polanco Gómez encabezó de manera personal las investigaciones en torno a este caso y ofreció una conferencia de prensa en esta ciudad de Puerto Plata dos días después en compañía del procurador general de la República; Francisco Domínguez Brito, pero no se mencionaron ni por asomo las famosas cajas fuertes, ni los 60 millones, pero ni mucho menos los objetos perdidos.
 
No obstante ahora, luego de pasar casi ocho meses de este enmarañado acontecimiento es  cuando las autoridades revelan los detalles de las investigaciones, contenidas en el expediente que contiene las acusaciones criminales contra 14 agentes policiales, incluyendo los dos coroneles que entonces comandaban la dotación de la Policía Nacional en Sosúa y el Departamento Adjunto de Investigaciones Criminales de Puerto Plata.
 
Generales negligentes

Sobre esta situación fueron sancionados con 10 días de arresto por actuar con negligencia y falta de mando en sus funciones a los generales de la Policía Nacional; Neil Aldrin Bautista Almonte en ese momento jefe de Departamento de Investigaciones Delictivas (DINTEL), Máximo Báez Aybar entonces director de Investigaciones Criminales (DICRIM) y Pablo Roberto Almonte Morales, a la sazón Director Regional Norte de Puerto Plata cuando  el 17 de octubre del año pasado ocurrieron los hechos.
 
El general Bautista Almonte, al ser interrogado al respecto señaló que supuestamente se enteró del incidente por una llamada que le hiciera el capitán Gerson Acosta Polanco respecto a la desaparición de las cajas fuertes con la alegada suma de 60 millones, pero que sólo se limitó a ordenar que investigara y no se ocupó personalmente del asunto.
 
De igual manera, Báez Aybar declaró que no se trasladó hasta el lugar de los hechos porque el jefe policial de entonces, el mayor general Polanco Gómez, le sugirió que se quedara, porque él acudiría para iniciar las pesquisas junto general Bautista Almonte. 
 
Mientras que el general Almonte Morales, comandante de la Plaza de  Puerto Plata, ha sido acusado de actuar con falta de tacto, mando y control en sus funciones y al ser interrogado declaró que se enteró de los hechos por una llamada de uno de los coroneles que estaban en el lugar del operativo, informándole que había una persona muerta como consecuencia de un tiroteo en el citado proyecto habitacional y varios agentes heridos.
 
Pesquisas e interrogatorios 

Según el informe emitido el 21 de junio de este año, ocho meses después, se instruyó coordinar con la Procuradora Fiscal Titular de Puerto Plata; licenciada Alba Núñez Pichardo, para realizar las pesquisas de lugar sobre las querellas presentadas por el empresario alemán Peter Brunck y nacional haitiano Rigaud Petit- Frere en contra de los miembros de la Policía Nacional implicados en el caso.
 
En los interrogatorios practicados, se establece que a las 8:30 de la mañana del 17 de octubre del 2012, según la declaración de Peter Brunck, lo llamó por radio de intercomunicación la señora Hailk Saelb, para comunicarle que desconocidos penetraban al residencial con armas de fuego y que al salir de su vivienda para ver lo que pasaba y al notar que algunas de las personas estaban vestidas de policías preguntó que dónde estaba la orden judicial para entrar a su propiedad, siendo golpeado a puños y patadas por los agentes policiales que además lo agredieron con las culatas de sus armas de fuego.
 
El ciudadano alemán Ulrich Muhel, también declaró que a las 8:25 de ese mismo día, lo llamó el “guachimán” Francisco Hernández, diciéndole que en la puerta había varias personas diciéndole que eran policías, quienes se introdujeron saltando la verja, abriendo la puerta desde adentro para penetrar al interior de la casa y les preguntó que dónde estaba el fiscal para entrar o la autoridad judicial para penetrar a la casa, pero que de una forma abusiva los miembros de la Policía Nacional lo despojaron de su radio y procedieron a meterse a la casa de Peter Brunck.
 
Asimismo, el haitiano Rigaud Petit- Frere declaró que trabaja como jardinero en la residencia de los esposos Solvey Isabella Ditrich Bosen y el hoy fenecido Peter Ebert Demetrick,  y a la misma hora de ese día, en el Proyecto La Mulata III de Sosúa, un grupo de policías vestidos de civil y uniformados rompieron la puerta de entrada de la residencia de Peter Brunck, le ordenaron ponerse las manos en la cabeza y sin medir palabras le dieron tres disparos, uno en la pierna izquierda y dos en la derecha.