Es mucha el agua que ha caído desde que Osvaldo Virgil se convirtiera en el primer dominicano en deslizarse al beisbol de grandes ligas en 1956; y un poco menos, desde que el lanzador Alejandro Peña, hiciera su debut en 1981, convirtiéndose en el primer puertoplateño en accionar en los montículos más alto del beisbol.
Mucho se dice del vigor y la destreza de los peloteros dominicanos, del famoso ¨Platano Power¨ y del mangú, pero a través de este artículo, se conocerá laaventura que conduce a descubrir un enigma oculto por décadas.
En Puerto Plata, el Municipio de Altamira y una comunidad llamada El Copey, un lugar de ambiente y vida sana, de viento constante y verdes montañas, quieremostrar a sus visitantes el secreto de la fuerza de uno de los peloteros dominicanos más destacado en las grandes ligas.
Este enigmático viaje, inicia conociendo la comunidad El Copey y en ella el Estadio Bartolo Colón, el cual lleva el nombre de un hijo de Altamira, que hoy día se conoce como uno de los lanzadores más destacados de las ligas mayores. Con la contribución de esta instalación deportiva, el estelar lanzador retribuye de manera concreta el amor, el cariño y las inolvidables experiencias vividas en su niñez y juventud acompañado de su pintorezco amigo ¨Pancho¨.
Ya dentro de las instalaciones del estadio, se encuentra la Galería de Beisbol Comunitario. Durante el recorrido por la galería encontraremos textos, ilustraciones, además de las orientaciones de un guía experto, que permiten conocer la historia no solo del deporte del bate, el guante y la pelota; sino que también, cuenta la historia que convirtió los sueños de un niño en toda una realidad de éxitos en la gran carpa del beisbol.
Dentro de esta misma galería, se pueden experimentar algunas de las tareas y oficios que según leyendas de la comunidad, fueron las que desde su niñez dieron a Colón la potencia y velocidad de lanzador que hoy tiene en sus brazos.
Luego de haber develado el enigma de la fuerza de este gran lanzador, es necesario salir al terreno de juego; y para eso, esta aventura permite vivir la experiencia de un partido de pelota, practicando con los jóvenes de la comunidad y quién sabe, a lo mejor con el mismo Bartolo Colón, ¿Por qué no?
Finalizando la travesía, es posible adquirir una gran variedad de productos locales, que permitirán contar y compartir a los nuestros, la aventura de develar el enigma de la fuerza de los peloteros dominicanos.
Toda la información sobre fechas horarios y costos para vivir esta experiencia, pueden obtenerla contactando la Unidad Municipal de Patrimonio Comunitario (UMPC) de Altamira a través de su Encargado el Sr. Nelson Cabrera al número telefónico 809.690.6001.