La ètica y el bloqueo mediàtico (III)

Ultima Actualización: martes, 28 de julio de 2015. Por: Angel Artiles Diaz

¿Qué la gente està preocupada por la incapacidad de sus hijos para leer? “ALEGRAOS dijo McLuhan, los niños van realmente por delante de vosotros, y estàn entrando en el nuevo mundo.”

La teoría de Marshall McLuhan, se basò, en tèrminosgenerales en ofrecer teorìas sobre el efecto del medio mismo,independientemente de su contenido, bastando que “el comunicador”  se presente como artífice cientìfico cuyopropòsito es hacer que los medios funcionen de modo que afecten la mente.

¿Està  la gentepreocupada por el bajísimo nivel cultural de la televisión? Se preguntaMcLuhan, y agrega: “Sed valientes, esto es una nueva “Implosiòn  ambiental” que està transformando a la gente,de seres humanos fragmentados en personas completas, polifacèticas, cuyossentidos trabajan todos al mismo tiempo. NO IMPORTA EL PROGRAMA. Es el mediomismo lo que importa.”

Casi 50 años después de esa afirmación, basta con sintonizarcualquier medio de comunicación para comprobar que  a las masas borrachas de percepciónmediàtica, no les importa el programa, porque estàn arrodilladas en los altaresalienantes de los medios, la mayoría de los cuales están dirigidos por estultostarúpidos, que ni se imaginan que Marshall McLuhan existió.

¿Qué   la gente estàpreocupada por la incapacidad de sus hijos para leer? “ALEGRAOS dijo McLuhan, losniños van realmente por delante de vosotros, y estàn entrando en el nuevomundo.”

La siguiente cita ubicarà a los lectores que no conocieronlas teorìas de McLuhan, en la decepcionante verdad de que sus dislates son hoypalabra de dios, veamos:

“Los jóvenes que han experimentado una dècada detelevisión  estàn penetrados naturalmentedel impulso hacia el compromiso profundo que hace que todos los objetivos remotosde la cultura habitual parezcan no sòlo irreales, sino tambièn insignificantes,y no sòlo  insignificantes, sino tambiènanèmicos.”(Pàg. 310, El medio es el mensaje)

Duele admitirlo, pero es asì. Para la juventud del mundo dehoy, que se ha pasado màs de tres cuartos de su vida frente a un aparato detelevisión, los objetivos remotos de la cultura habitual, aparecen revestidosde irrealidad, con ribetes de insignificancia y con un cuadro clìnico anèmico.

“Regocijaos, gritò McLuhan, Todos los grandes adelantostecnològicos se producen gracias al militarismo y a la guerra. Guerreandocontra un paìs atrasado lo ayudamos a hacer progresos. La guerra no es nuncamàs que cambio tecnològico acelerado…el militarismo es por sì mismo la rutaprincipal de la educación tecnològica y de la aceleración para las àreasretrasadas.”

 

¿Qué le parece a usted esta aberración?

Evidentemente que este es un disparate cruel, pero, es quepara McLuhan, el ser humano no necesita conocimiento consciente, ni tampoconecesita pensamiento racional. Solo necesita lo que el sistema y el comercio ledigan mil veces al día por los medios de comunicación. (continuarà)