Los océanos fuente de vida, preservarlos saludables es nuestro deber

Ultima Actualización: lunes, 15 de junio de 2020. Por: Artículo Invitado

Por: Roque J. de León B.

Los océanos son la proporción de nuestro planeta ocupada por agua marina que bordean a los continentes y que actualmente cubren el 71% de la superficie terrestre, significando el 97% de las aguas.  Vale decir que existen 5 (cinco) océanos: Pacífico, Atlántico, Índico, Antártico y Árticos.

 

Existen teorías que sostienen que la edad de los océanos es de 4,000 millones de años.

 

Constituye un reto hablar de un sistema tan complejo e importante para la existencia humana como es el oceánico.  Este guarda en su interior recursos naturales renovables y no renovables que cada año generan a la economía mundial 70 billones de dólares del Producto Interno Bruto (PIB), de acuerdo a los informes del Foro Económico Mundial.  

 

Además proporciona el 80% del oxígeno que requerimos,  los mares por la gran cantidad de calor y carbono que almacenan se convierten en reguladores por excelencia del clima.

 

De acuerdo a investigaciones presentadas por diversas instituciones, existen 230,000 especies marinas registradas incluidas más de 16,000 de peces.  Aunque se presume que hay aproximadamente dos millones pendientes de ser documentadas.

 

El 8 de junio de cada año fue decretado por la Organización de las Naciones Unidas (ONU), Día Mundial de los Océanos.

 

A pesar de que esa propuesta se presentó en el año 1992 en la Cumbre de la Tierra en Río de Janeiro, no fue hasta el 5 de diciembre del año 2008 cuando se le dió la importancia requerida.  Esta celebración es la forma de concienciarnos sobre la importancia que revisten éstos en nuestro diario vivir.

 

No obstante el fin con el que fue creado el Día Mundial de los Océanos y su importancia, sólo el 5% de estos está protegido.  El daño causado por la industrialización, la sobre pesca, la actividad minera, transporte marítimo exagerado, desechos plásticos, derrames de fertilizantes, los conglomerados humanos en las próximidades de las playas y la explocación turística que por lo regular se especializa en la contaminación por desechos sólidos, destrucción de arrecifes y bancos de corales y manglares, hacen de los océanos y sus ecosistemas un espacio cada día más vulnerable y desesperanzador para la humanidad.

 

En la actualidad diferentes científicos estiman que los mares más contaminados son: el Mar del este de China, algunas partes del Mar Negro, la bahía de Chesapeake (EE.UU), el estrecho de Kattegat (Suecia) y el Norte del Golfo de México-Oceano Atlántico.  En ellos, debido a la  falta de oxígeno (eutrofización) no es posible la vida, creándose las llamadas zonas muertas de las cuales existen unas 400 alrededor del mundo.

 

Nuestra República Dominicana, que está tocada al Norte por el Océano Atlántico y al Sur por el Mar Caribe o Mar de las Antillas; unidos por el Canal de la Mona que está al Este, no escapa a esta realidad.

 

Nuestro país tiene el control de sus aguas territoriales con facultades exclusivas de propiedad y jurisdicción sobre ellas incluyendo el suelo y subsuelo.

 

En el año 1977 nuestros legisladores crearon la ley 573 que estableció la Zona Económico Exclusiva (ZEE), con una extensión de 200 millas náuticas.  Incluye al Norte los bancos de La Plata y de la Navidad, de interés pesquero tradicionalmente, y en la actualidad convertido en Santuario de Ballenas Jorobadas.

 

Hay que destacar que contamos con otras importantes riquezas marinas que debemos cuidar como son nuestros manglares casi en extinción, en Estero Hondo - la Isabela, Puerto Plata: El Santuario de Manatíes; Cayo Arena, Cayo Siete Hermanos, Parque Nacional el Morro en Montecristi, entre otros tantos.

 

Al adentrarnos al complejo mundo de los océanos y afianzar nuestra cocienciación del incalculable valor e importancia que representan para la humanidad, nos hace reflexionar sobre la enorme responsabilidad que tenemos como ciudadanos del mundo de asumir como un reto su preservación, a la vez exigir al Liderazgo Universal, establecer políticas claras al respecto y comprometerse con su cumplimiento.

 

ROQUE J. DE LEÓN B.

DIPLOMADO EN COMUNICACIÓN SOCIAL INTEGRAL

MIEMBRO DE: SNTP Y SINLOPP