FUGITIVO

SE ENTREGA ZAR DE LAS DROGAS BUSCADO POR LA POLICÍA PUERTO PLATA

Por: Gregorio Del rosario

Lunes 06 de Abril de 2009   

Franklin Domínguez Hiraldo Batista, considerado el zar de la distribución de drogas en pueblos de las regiones del Cibao, Nordeste y la costa Norte, a quien la Policía buscaba mediante orden de arresto de un juez competente, se entregó a la institución del orden público al caer la tarde de este lunes y de inmediato proclamó su inocencia en los cargos que se les imputan.

Este último, de acuerdo a lo informado por la Policía, era buscado por su participación en la distribución y ventas de drogas en barrios de los pueblos de las regiones del Cibao, Nordeste y la costa Norte.

Por estos hechos también era perseguido por la Dirección Nacional de Control de Drogas (DNCD), en Puerto Plata.

Una comisión del comité provincial de los Derechos Humanos, encabezada por el profesor José Artiles y los abogados José Carlos González, Úrsula Díaz y Carlos Ciriaco González, entregaron a Hiraldo Batista al Procurador Fiscal de Puerto Plata, licenciado Víctor Mueses.

A su vez, el representante del ministerio público entrego al detenido al coronel Eddy Pérez Peralta, encargado de la Dirección Adjunta de Investigaciones Criminales de la Policía en esta provincia.

Previamente los miembros de la comisión de los Derechos Humanos y del grupo de abogados que entregó al ministerio público a Hiraldo Batista, un supuesto zar de las drogas en esta región, solicitaron a la Policía y a los representantes de la justicia que se respete la integridad física del detenido.

El Procurador Fiscal Mueses al ser cuestionado por los periodistas dijo que contra Hiraldo Batista existen una series de cargos, por lo que  solicitara de inmediato medida de coerción ante el Juzgado de la Instrucción de Atención Permanente de Puerto Plata.

Hiraldo Batista era buscado mediante una orden de arresto del Juzgado de la Instrucción de Atención Permanente por supuestamente patrocinar el respaldo de oficiales y agentes de la Policía Nacional, así como de la Dirección Nacional de Control de Drogas para que lo protegieran en sus negocios ilícitos.

Hiraldo Batista al ser entregado al coronel Pérez Peralta fue esposado, y se le puso un chaleco antibalas, así como un dispositivo de seguridad.

Este fue conducido bajo un fuerte dispositivo de seguridad desde el despacho del Procurador Fiscal hasta la sede la Dirección Regional Norte de la Policía para fines de investigación.

Por esa causa más de 30 oficiales y miembros de la Policía Nacional Dirección Nacional de Control de Drogas de esta provincia fueron cancelados y sometidos a la justicia civil, al ser  interceptadas llamadas telefónicas.

También al supuesto capo de la droga se le acusa de haber pagado varios miles de pesos para sacar de combate a Julio Cesar Almonte García, quien cayo abatido a tiros junto a Ruddy y José Cabrera Peña en la calle 30 de marzo, el dos de enero del 2009, a mano de una patrulla de la Policía Nacional que dirigía el primer teniente José Daniel Cepeda Rubio.

Por ese hecho guardan prisión en el Centro de Corrección y Rehabilitación San Felipe de Puerto Plata ocho oficiales y agentes de la Policía Nacional, entre ellos el coronel Frank Félix Almonte Castillo, los tenientes Pedro Toribio y José Daniel Cepeda Rubio entre otros.

José Artiles y los abogados José Carlos González.

La patrulla en la que era conducido Franklin Domínguez Hiraldo Batista.

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