DE FUERA VENDRÁN Y DE CASA NOS ECHARÁN

Europa y Estados Unidos protegen a sus productores agropecuarios e industriales. Y son y serán cada vez más proteccionistas. A los dos les encanta hablar y ponderar las ventajas del libre comercio, pero nadie ha podido convencerlos de desistir de los subsidios o estímulos a sus sectores productivos y financieros. “Innegociable”, “hasta ahí llegamos”, dicen cada vez que le tocan el tema.

En Estados Unidos protegen a los productores de maíz volcados a la producción de etanol con 6,000 millones de dólares anuales para impedir que el etanol de caña brasileño pueda competir con éxito. (Si es así, el etanol de caña que producirán empresarios de República Dominicana –Central Romana y Casa Vicini tampoco podrá entrar al mercado norteamericano). El gobierno norteamericano va en auxilio de cualquier sector productivo en apuros: líneas aéreas, bancos, farmacéuticas, fabricantes de vehículos, de aviones, de software. “Para eso es el gobierno, razonan los poderosos empresarios, para eso son los fondos públicos”. Es lo que ha hecho Bush, hizo Clinton y hará cualquiera que gobierne allí, se llame Obama o McCain.

Los europeos, igual, protegen a sus productores de trigo y remolacha, a ganaderos, a empresas tecnológicas ligadas al aprovechamiento energías eólica y solar, también a su industria automovilística para el fomento de autos llamados ecológicos, subsidian a sus ayuntamientos para la instalación de nuevas tecnologías “amistosas con el medio ambiente” y mucho más.

Con ellos compiten los productores de la República Dominicana. Sólo que Europa y Estados Unidos tienen muchos recursos, que República Dominicana no tiene, para proteger a los suyos. ¿Qué debe hacer República Dominicana? ¿Debe República Dominicana hacerle caso a los emisarios europeos y estadounidense o a sus agentes encubiertos en organismos internacionales que recomiendan que no apoye a los productores dominicanos y que los deje desamparados mientras ellos apoyan a los suyos? ¿Es sostenible para República Dominicana, para el Estado y las finanzas públicas mantener o embarcarse en el “festival de subsidios”?

Desde China, se informa, están trayendo pupitres que se fabrican aquí. Los compra Educación. Es probable que las autoridades de la secretaría de Educación justifiquen su decisión en que los pupitres chinos cuestan menos y están aquí en la cantidad requerida y cuando ella los necesita. Es decir, que la incapacidad de los muebleros dominicanos de producir a menor costo, en grandes cantidades y de entregar a tiempo, estaría impidiendo que se compren y se utilicen pupitres dominicanos. No sabemos si será así, pero digamos que sí, que son unos incompetentes los muebleros dominicanos, a pesar de que exportan con mucho éxito en todo el Caribe y Centroamérica.

¿Por qué alguien del gobierno con autoridad para resolver no se sienta con los muebleros y les cuenta: Educación está comprando pupitres chinos; quisiéramos comprárselos a ustedes, qué necesitan ustedes, qué puede hacer el gobierno para que ustedes compitan en precio, calidad y entrega con los chinos?  Y entonces hacer un plan.

¿Por qué los funcionarios del gobierno no hacen rondas de visitas a las asociaciones de productores para enterarse de cómo puede ayudar el Gobierno a evitar que otros vengan desde fuera y desplacen la producción nacional?

Eso es mejor gobernar, nos parece.

Publicado con autorización expresa de los autores. www.perspectivaciudadana.com