OTRA VEZ

Por: Roberto Rodríguez-Marchena

Lunes 22 de Junio de 2009

Hace quince días denuncié la cacería en motocicleta en la que se involucran motoconchistas de dos barrios pobres, persiguiendo, emboscando salvajemente, a obreros haitianos sin papeles.

Si hoy vuelvo a tratar el asunto es por dos razones. La primera, la desagradable y obsesiva hostilidad de políticos y comentaristas de la extrema derecha local en los medios de comunicación contra los extranjeros pobres, mayormente negros trabajadores haitianos en la construcción y la agricultura y en muchísima menor medida contra maestros y médicos cubanos. (Escribo local y no dominicana porque sus argumentos se fundan en las mismas fobias y en los mismos temores que se utilizan contra marroquíes y ecuatorianos en España, magrebíes y subsaharianos en Francia, turcos y polacos en Alemania, españoles y búlgaros en Suiza, rumanos y albaneses en Italia o mexicanos, salvadoreños y dominicanos en los EEUU).

La segunda, la confirmación periodística de la aberrante práctica de la Dirección de Migración a la que hice mención. Publicada en el periódico Hoy el 19 de este mes, aunque no figuró en la edición digital, bajo la firma de Abraham Montero, a quien conocí mientras ejercí de Portavoz del Gobierno dominicano, pues cubría la fuente Palacio Nacional. Menciono a Abraham porque tengo constancia de su rigor profesional al reportar hechos y opiniones.

El titular bastaría para indignar al menos humano de los mortales y ahorrarnos la macabra lectura del cuerpo de la noticia: “Muere haitiano al caer de edificio; huía de Migración”.

“Un haitiano murió anoche al caer de un edificio en construcción en la Urbanización Real, en la capital, cuando trataba de escapar a una redada realizada por la Dirección General de Migración.

“La víctima fue identificada como Willy Senatu, 20 años, quien cayó al suelo desde un noveno piso, al saltar con una soga a otro piso del edificio número 19, de la calle Manolo Tavárez Justo casi esquina Pío XII.

“Decenas de sus compatriotas se aglomeraron en el lugar, algunos lloraron y otros protestaron por el alegado atropello que Migración comete en su contra.

“Raynold Melan denunció que agentes de Migración acostumbran a hacer redadas en las construcciones y que a los haitianos detenidos les quitan el dinero. Dijo que varios extranjeros fueron apresados.

“Explicó que Migración llegó al edificio a las 7:00 pm en un minibus y una camioneta sin placas y se marcharon inmediatamente después del accidente.”

Hasta aquí la noticia tal cual fue publicada.

Cuatro días después, ni la Dirección de Migración, tampoco la empresa constructora, han desmentido lo ocurrido.

Dígame usted, fuerzas represivas que se mueven de noche, en vehículos sin placas, quitándole dinero a pobre gente que gana míseros salarios, duerme en el piso, entre varillas, lozas y sacos de cemento y se alimenta de algunos trozos de víveres y locrio de pica pica, constituyen un verdadero peligro público, porque ese día provocaron la muerte de Willy Senatu, pero mañana puede ser cualquier dominicano cuando una de estas brigadas de "guardianes de la soberanía" asuma que la víctima anda con unos pesos encima.

Lo lamentable es que, a pesar de la noticia de Abraham Montero y del periódico Hoy, los mencionados políticos y comentaristas de la extrema derecha seguirán obsesionados en su pretensión de envenenar los corazones dominicanos, mintiendo, diciendo que el verdadero peligro y el gran problema de nuestro país son los obreros y trabajadores agrícolas haitianos.

¡Por humanidad, detengan eso!

Publicado con autorización expresa de los autores. www.perspectivaciudadana.com