REFLEXIÓN CON ESTEROIDES

Por: Ramón Tejeda Read

Miércoles 11 de Febrero de 2009

El descubrimiento de que mucha de su destreza con un garrote en la mano se debe a los esteroides costará a Alex Rodríguez decepciones y antipatía. La mentira y el fraude quedarán así, en cierto modo, castigados.

Pero, ¿quién castiga a quienes decían que invadían Irak en busca de armas de destrucción  masiva?

Esa mentira ha costado a Estados Unidos más de cuatro mil muertos y a Irak decenas de miles de hombres, mujeres y niños asesinados.

Esa mentira ha costado a los iraquíes su presente y su futuro como nación y como Estado y sirvió para empollar el huevo de una crisis económica que durará años; que postra en la incertidumbre a millones de personas en todo el mundo, y cuyas últimas consecuencias aún están por verse.

Aunque nos parezca traído por los cabellos, el fraude y la mentira de A. Rod y el de muchos otros como él, bien pueden ser vistos como la manifestación individual o particular de un sistema general de fraude y mentira que, en su dimensión política y económica, permite a unos cuantos medrar impunemente en la miseria, la ignorancia e indefensión de las grandes masas.

Pero parece que ya es tiempo de que los poderosos que gobiernan en los distintos niveles de la sociedad humana se hagan cargo de que no se puede gobernar con tal  desparpajo y pretender que todo el que tenga un mínimo de osadía no haga lo mismo tan pronto le toque su turno al bate.

Porque el fraude y la corrupción no surgen de abajo para arriba. Todo lo contrario, quienes están ubicados en los estratos bajos de la sociedad, los gobernados, usualmente no hacen sino reproducir las prácticas de quienes gobiernan.

Publicado con autorización expresa de los autores. www.perspectivaciudadana.com