LLEGO LA HORA

 

GOBIERNO COSMETICO DE POLITICAS TERMINATOR 

 

Ahora los dominicanos y dominicanos que votaron para elegir de nuevo al Dr. Leonel Fernández y al PLD al Poder, han comprobado que  resultó “peor el remedio que la enfermedad”.
Mirna Santos 

 

Les queda de lección a los dominicanos y dominicanas que votaron masivamente para que el Dr. Leonel Fernández ascendiera de nuevo al poder, que hay que aprender a digerir los errores.

El PLD y su política terminator han establecido,  cuando han gobernado, que no creen en el pueblo, que no creen en la inserción de políticas sociales, que no creen en la gente, de ahí la anulación de los programas sociales, el castigo a la población con la aplicación de impuestos a todos los productos de consumo masivo, la anulación del poder de decisión de las fuerzas productivas de la nación,  penalizando a los empresarios que han podido mantener proyectos productivos exitosos, con más  impuestos, en fin, la modernidad de un Presidente, sólo está enfocada en sus ínfulas faraónicas y en una supuesta  mentalidad cibernética que sólo utiliza para impresionar.

Del 1996 al 2000, hicieron lo que hoy están replicando: Una gran proliferación de propaganda falsa de bonanza económica sólo bendecidas en los datos que aporta el Banco Central; el único Banco Central en el mundo que se promociona  en los medios de comunicación masiva, porque siempre lo han utilizado los peledeístas para falsear la verdad, publicando datos que no se corresponden con la realidad social de los dominicanos y dominicanas.

Este es un Gobierno cosmético, que oye pero no escucha.  Están acostumbrados a mentir y a falsear la verdad y también a jugar a la doble moral.  El Dr. Leonel Fernández ha creado para sí mismo una fantasía de Gobierno, ha establecido en estos dos años y seis meses que lleva en el Palacio Nacional, que sólo le interesa las grandes ostentaciones, los grandes lujos y la propaganda falsa planteada como un sofisma “de que una mentira repetida muchas veces, se convierte en verdad”.

Este es un Gobierno mitómano, que crea sus propias imágenes de bonanza,  que las vende como verdades  y lo podemos constatar cuando copan todos los medios de comunicación masiva para desmentir los informes que nos llegan de organismos internacionales que monitorean los procesos económicos y sociales de América Latina y que han podido establecer por la realidad que vivimos de desempleo, desnutrición, inseguridad ciudadana, analfabetismo,  de que este país se ha convertido en estos dos años y medio de Gobierno peledeístas en un Estado Fallido.

A eso se agrega el despido masivo de empleados de las zonas francas,  fundamentalmente la de la ciudad de Santiago, donde la pasada semana fue anunciada la cantidad de 17,000 empleados menos que pasarán a formar parte del conglomerado de desempleados, lo que contribuirá a aumentar los grandes cordones de miseria que rodean las ciudades del país y, por consiguiente,  los niveles de delincuencia.

Unida esta realidad además a los datos de la Encuesta de Demografía y Salud (ENDESA) y ENHOGAR, que dice, que entre el 7% y el 9% de los niños/as en edades de 0 -3 años están crónicamente desnutridos/as debido a insuficiencia alimentaria, lo que totaliza entre 56 y 74 mil niños/as que tienen un irreversible retardo en el crecimiento, en las capacidades de aprendizaje y en el desenvolvimiento productivo.  De ahí que los niños/as desnutridos/as de hoy serán indefectiblemente personas con deficiencias intelectuales irreparables.

Esa realidad estadística establece por tanto que el 47% de los dominicanos viven por debajo de la línea de la pobreza unida a la expectante noticia de que industrias que han mantenido la estabilidad del país, por sus aportes al fisco, como Brugal & Co y la Cervecería Nacional Dominicana, no les ha quedado más camino que publicar la disminución de más de un 30% de sus ventas en el primer mes de este año 2007, en comparación con el mismo período en el 2005 y 2006, lo que nos dice, hasta donde la presión económica de insolvencia se irá cerrando como un manto premonitor de indigencia colectiva.

Los peledeístas nos han hecho aprender a pura fuerza del hambre y la disminución de la calidad de vida de todos los dominicanos y dominicanas, que “los tropezones hacen levantar los pies”.

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