LLEGÓ LA HORA

  LA ESPERANZA EN LA DESESPERANZA

Mirna Santos 

Cuando llegó por segunda vez al poder el Dr. Leonel Fernández le prometió de nuevo al país un proyecto de Estado, donde las viejas estructuras de discriminación y de brecha ancestral de la pobreza, fueran estrechándose, con medidas de ajuste económico que favorecerían a las clases mas desposeídas y penalizarían a los que tradicionalmente se habían hecho ricos a costa del sudor del pueblo dominicano. 

Recuerdo cuando en 1996, un grupo de empresarios de Puerto Plata, se hizo eco de los aires renovadores que traería un Gobierno del PLD y  asumieron la posición de enunciar las buenas nuevas que traería para el pueblo dominicano, que Leonel Fernández fuese elegido Presidente, utilizando como consignas, además de un nuevo proyecto de Estado, la adición de un concepto racista y xenófobo en contra del Dr. Peña Gómez y del PRD. 

Sin embargo, la llegada del PLD tanto en el Gobierno de 1996-2000 como en este período no ha implicado cambio alguno en la estructura del Estado, ni ha significado una visión nueva, renovadora o revolucionaria.  Por lo contrario, el Dr. Leonel Fernández y el PLD han profundizado las desigualdades sociales, han mantenido el esquema que heredó tanto del Partido Reformista como del Partido Revolucionario Dominicano, a quienes criticó desde la oposición, acusándolos de corruptos y traidores, de vender o empeñar la soberanía nacional. Para el PLD todos eran corruptos. Acusó al doctor Balaguer de crear 300 nuevos millonarios al amparo de la corrupción y el tráfico de influencia, y sin embargo es en este Gobierno del PLD que se apaña a  un Felucho Jiménez, Secretario de Estado de Turismo, que ha tenido que ser interpelado por la Cámara de Diputados por “tráfico de influencia”, al auto otorgase permisos para beneficios de sus empresas turísticas, asumiendo el papel de juez y parte, y que se le ha permitido además, que maneje de manera discrecional un impuesto ilegal en dólares, de entrada y salida a los turistas, para realizar obras que no han sido solicitadas ni forman parte de las prioridades de las comunidades donde las ha ejecutado, como ha sucedido aquí en Puerto Plata, sólo porque con estas obras, favorece grupos económicos locales con comisiones y otras prebendas.  

Cuando palpamos los niveles en que ha caído este Gobierno comprando lealtades, nos damos cuenta, que los famosos enunciados de modernidad, son sofismas que utiliza el Dr. Leonel Fernández, para seguir engañando a la gente.   Por ejemplo, Del diálogo de tres horas sostenido con el  General ® Soto Jiménez, ex  incumbente de la Secretaría de las Fuerzas Armadas, del Gobierno de Hipólito Mejía,  y cabeza de un supuesto movimiento político, salió el nombramiento de su hija como Cónsul en España y quien sabe cuántas otras lindezas, lo que nos dice, hasta dónde se ha ido degenerando y prostituyendo la actividad política dominicana, desde la asunción al Poder de los “inmaculados peledeístas”, y cómo personeros  que han sido beneficiados con puestos que ha servido para darles a conocer de su existencia, tienen la caradura de esgrimir enunciados de adecentamiento del trabajo político y son los primeros que se prestan a vender, al mejor postor, sus enunciados. 

El PLD pidió tres meses para resolver el problema energético del país; igualmente aseguró que de llegar al gobierno acabaría con la corrupción. Decía que su ideal era servir al partido para servir al pueblo. El PLD se colocaba a la izquierda de los "partidos tradicionales" PRD y PRSC. De hecho muchos izquierdistas fueron asimilados por el PLD ante el fracaso de los partidos revolucionarios marxista-leninistas. Y qué nos dice ahora el comportamiento asumido por los funcionarios de este Gobierno, cuya notoriedad ha traspasado fronteras con los famosos sueldos que ganan que superan el monto que devenga un Jefe de Estado de los países más desarrollados como Estados Unidos, Inglaterra, Francia, Japón y Alemania, mientras el sueldo mínimo que perciben más del 60% de los dominicanos/as no llega a los cuatro mil pesos.  

Por eso la desesperanza de los dominicanos y dominicanas, que en la encuesta Gallup – Hoy alcanzan el 58% de los y las que desean irse del país.  Pero como de la desesperanza nace la esperanza, entendemos que el pueblo dominicano, en su mayoría, está esperando el próximo 16 de mayo del 2008, para decirle al PLD y al Dr. Leonel Fernández: “De que  se van, se van”.   

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