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LLEGÓ LA HORA
LOS USOS, MAL USO Y ABUSO DE UN IMPUESTO ILEGAL
“Cuando ves un gigante, examina antes la posición del sol,
no vaya a ser la sombra de un pigmeo”. Von Handerberg.
Mirna Santos
Cuando el pueblo se tiró
a las calles a combatir los remantes de la tiranía trujillista,
se produjeron acciones dantescas, producto de la indignación
contenida que tenía la gente amordazada y eximida de su
expresividad durante 30 largos años.
Han pasado cuatro generaciones donde los
procesos traumáticos vividos por la preservación de la
democracia constituyen una parte de la historia.
El furor que caracterizaban las demandas de
la gente ha ido mermando, pero subyace la conciencia legada por
los que nos antecedieron de mantener siempre viva la llama de
exigir sus derechos de supervivencia.
Por eso pienso que
jugar, como lo ha hecho este Gobierno, a la amenaza, a la
imposición de decretos y al dispendio del erario público de
manera descarada, para sustentar la reelección y para erigir
obras no prioritarias como el Metro, relegando la inversión en
educación y la salud entre otros renglones prioritarios que
contribuyen a ir produciendo una reversión en los niveles de
pobreza de la población, no va a acallar, la decisión de juzgar
y de imponer sanción a los que en un discurso engañoso,
maquinador y alienante, vendieron modernidad y hoy están
utilizando los impuestos que nos sacan el dinero de nuestros
bolsillos, para el enriquecimiento personal de algunos cuantos.
Las cifras que nos
ubican como país con grandes brechas sociales, se encuentran
sintetizadas en la reflexión expuesta por la directora regional
para América Latina y el Caribe del Programa de Desarrollo de
las Naciones Unidas (PNUD), Doctora Rebeca Grynspan Mayufis.
Esta funcionaria internacional estableció como una incógnita si
se logrará mantener el crecimiento constante “sin presión” de
América Latina y que este sea acompañado de una reducción de la
desigualdad en la distribución de la riqueza, para poder hablar
de efectividad en el combate a la pobreza.
Si tomamos como un patrón de medición estas
palabras de la Directora Regional del PNUD, y profundizamos en
las estadísticas que nos ofrece de manera pasmante el Programa
Mundial de Alimentos (PMA) en el período 2000 – 2006, de que
nuestro país se encuentra ubicado en el cuarto lugar de los
países hambrientos; en el tercer en desnutrición en el mundo, y
que el nivel de niños desnutridos creció alrededor de 20 mil
por año, y de mantenerse esta tasa de incidencia se sumarán
otros 2,500 casos; por igual el Observatorio Regional del
Mercado Laboral de Centroamérica y República Dominicana ha
establecido que tenemos un 18% desempleados, siendo así el
índice más alto de la Región, por lo que podemos llegar a la
conclusión que tenemos un Gobierno cosmético que no cuenta con
estrategias para producir un cambio en el comportamiento de
nuestros indicadores sociales para contribuir a la
redistribución del ingreso.
Este Gobierno del PLD ha
jugado al factor olvido, confianza y suerte, para pretender
entronizarse en el poder, obviando las políticas de austeridad
que prometió en su discurso de campaña y a la vez gobernando a
través de Decretos inconstitucionales, que propician la
corrupción administrativa, la compra de lealtades y el
enriquecimiento de empresarios al servicio de la demagogia y la
mentira.
Piensan que se quedarán para siempre y que
el pueblo los seguirá reeligiendo como si el hambre, la
necesidad y la inseguridad, no fueran factores que propicien el
estadillo social que ha sido contenido porque la oposición ha
estado enmarcada en denunciar y no actuar. Por eso no miden las
consecuencias de utilizar sin control los fondos de un Decreto
ilegal e inconstitucional de aumentar el pago en dólares de
impuestos de entrada al país a los que nos visitan, para crear
una imagen cosmética de la realidad de paralización económica
que vivimos los y las dominicanos/as. Cuando
todos y todas sabemos que la utilización de estos fondos ha
favorecido una gran corrupción que arropará a quienes la han
estado propiciando. No me cabe ninguna duda por tanto, que el
mesianismo puro y simple será derrotado.
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