MUCHO CUIDADO SOSÚA

Ultima Actualización: miércoles, 10 de febrero de 2010. Por: Luis Henriquez Canela

Si en alguna época los ciudadanos de Sosúa deben cuidar su voto, es ahora. La trayectoria individual de cada uno de los aspirantes a cargos debe tomarse en consideración. De importancia relevante serían sus logros y sus aciertos. También el peso del fardo que acarrean debido a sus inconsistencias; indelicadezas como dirían otros.

Se sabe de sobra que hay aspirantes cuyos bonos no están muy altos debido a sus tortuosos trayectos por los caminos de convivencia familiar, profesional y empresarial. Sus éxitos con el manejo de lo propio está en entredicho. ¿Si usted no maneja bien lo suyo, podría manejar bien lo ajeno?


Para echar ese voto hay que pensar que son seis años de licencia. 2,190 días ostentando un poder de representación cedido por usted para que haga y deshaga en función de ese mandato. Para que se haga rico, para que compre lamborghini, ferrary o mercedes con el dinero suyo.  Para que el barrilito se convierta en la fuente donde sacie su sed acumulada por todas sus derrotas. Sólo fracasos puede cosechar una mente mediocre. 


Lo que estamos diciendo es que no se deje llevar por anuncios, mire a profundidad el carácter, de donde viene, quienes son sus familiares. ¿Se lleva bien con ellos? ¿Los ayuda? Los pueblos pequeños tienen esa ventaja; todos se conocen.


Ahí hay gente que mete a cualquiera al medio. Gente sin una pizca de honorabilidad. Son gentes mediocres cuyas vidas están salpicadas de agravios e insolencias para con sus conciudadanos. Y se creen líderes.  Como si el liderazgo consistiera en repartir a manos llenas el dinero del erario. Se creen líderes porque a fuerza de papeletas se hacen perseguir por una cuadrilla de dominicanos hambrientos y sedientos, no solo de comida y agua, sino de salud, educación y lo que es peor; de esperanza. 


Hablamos de Sosúa hoy, porque esta mañana llamó un defensor de uno de esos aspirantes de dudosa reputación a un programa radial, defendiendo con una animosidad pasmosa la honorabilidad de la podredumbre. Defendiendo con uñas y dientes lo indefendible.


Sosúa; cuando un candidato no lo quieren ni siquiera sus propios compañeros de partido, cuando un candidato se ha colado a fuerza de embustes, chismes y calumnias; cuidado.  


Recuerda que hay buenos. Por suerte son más. Mucho cuidado Sosúa.