Restaurar la Moral e Institucionalidad: una Imperiosa Necesidad en nuestro País

Ultima Actualización: jueves, 20 de agosto de 2020. Por: Roque de León B

Por: Roque de León B.

Si echamos un vistazo a la historia, veremos que es evidente que en nuestra sociedad por la forma como hemos permitido que se conduzcan quienes hasta ahora nos han dirigido y de igual manera los imitamos, notaremos que hay una peligrosa inversión de las buenas costumbres y del conjunto de normas establecidas que deberíamos observar y seguir todos los ciudadanos para vivir en un verdadero estado de derecho.  Esas y otras causas más, nos indican que estamos ante la necesidad de mirar hacia el ejemplo de nuestros restauradores; pero en esta ocasión haciendo renacer las ideas, y ponerlas en practica.

 

Nuestra querida y "respetada" República Dominicana en diversas ocasiones ha sido sometida a diferentes procesos traumáticos, como la quiebra propiciada desde el manejo del poder por Buenaventura Báez hasta el año 1861 y la posterior anexión a La Corona Española patrocinada por Pedro Santana el 18 marzo del mismo año.  Como consecuencias de esta, las rebeliones no se hicieron esperar, el general José Contreras lideró la primera y fallida el 2 de mayo; mientras que el Patricio Francisco del Rosario Sánchez que encabezaba una invasión desde Haití, fue capturado y ejecutado el 4 de julio del 1861, y a ésta siguieron otras.

 

A partir de enero del año 1862 los españoles fueron imponiendo sus dirigentes y trazando las  reglas de convivencia que eran muy injustas, entre ellas: la población debía entregar un animal de trabajo a los soldados sin recibir compensación alguna ("bagajes"), imposición del matrimonio católico cosa que irritó a la población, aranceles más altos para los productos no españoles y a los barcos y el intento establecer el monopolio sobre el tabaco.  Como si no fuese suficiente se rumoreaba que se impondría nueva vez la esclavitud; por lo que estos esperaban nuevas rebeliones especialmente desde el Cibao y el Norte a finales de ese año.

 

Es innegable que desde enero del 1863 los restauradores pusieron en marcha su movimiento que inició con el fallido intento de Neiba; en febrero se incursionaba por los pueblos del Cibao Central, la Sierra y  Línea Noroeste, donbe fueron derrotados por el Coronel José María Checo, quien luego se unió a ellos. A esas acciones siguieron las de Guayubín dondo obtuvieron una victoria y posteriormente la derrota; el ruido de esa victoria motivó a los libertadores de Santiago que fueron hechos prisioneros y ejecutados frente al cementerio.

 

Después de tanta sangre, esfuerzo y sacrificio de los valientes patriotas no fue hasta el 16 de agosto del año 1863 con la toma de Dajabón donde se dio el Grito en el Cerro Capotillo de "Viva La República" y el izamiento de nuestro pabellón tricolor encabezado por Santiago Rodríguez acompañado de un grupo de 13 valientes hombres, se iniciaba la real Guerra Restauradora.

 

Luego de perder 33 millones de pesos y sufrir bajas de 10,000 hombres aproximadamente (sobretodo por la Fiebre Amarilla), el Ministro de Guerra Español ordenó el cese de las operaciones militares en la isla, acción que fue llevada a la corte por el nuevo primer ministro Ramón María Narváez el que recibió como respuesta "que no era necesario financiar una guerra por un territorio que realmente no necesitaban".

 

La reina Isabel II firmó la anulación de la Anexión el 3 de marzo de 1865 y el 15 de julio, las tropas españolas salieron del territorio nacional.

 

Cuando observamos el estado de quiebra Económico-Financiera y Moral en que se encuentran nuestras instituciones y el país, lo que nos obliga ha estar a meced  de los Organismos de Financiamiento Internacionales y las grandes naciones de las que somos "aliados"; necesariamente tenemos que pensar que no hay  diferencia ante las situaciónes que prevalecían, aunque en épocas distintas, con los señores Buenaventura Báez y Pedro Santana.

 

Eso hace necesario el surgimiento de grupos de hombres y mujeres que con gran fimeza y  mayor compromiso nos aliemos para exigir y lograr que: El Cogreso Nacional, Ministerio Público y Poder Judicial sean organismos  funcionales capaces de garantizar a la sociedad un marco legal que nos retorne al estado de derecho que todos merecemos.  

 

Dentro de ese estado de derecho, los ciudadanos bebemos cumplir con nuestros deberes para poder reclamar con firmeza que los que a través de la corrupción en el pasado o cualquier otro gobierno acumularon bienes materiales injustificables, sean enjuciados de manera justa y responsable, los que resulten culpables retornen al Estado los recursos robados y paguen con justa prisión su delito.

 

Tenemos que responsabilizarnos de lograr que se pare el abuso al Medio Ambiente y a nuestros Recursos Naturales, incluidas zonas protegidas, por parte de los gobernantes e Instituciones del Estado que autorizan su explotación para beneficiar a urbanizadores locales inescrupulosos e inversionistas extranjeros, muchos de ellos con recursos de los que no se investiga su procedencia.

 

Es nuestra responsabilidad como sociedad, contribuir a que se nos garanticen los servicios básicos: salud, educación, alimentación y viviendas. Debemos lograr que estos dejen de ser un vulgar negocio al servicio de pequeños grupos Económicos y Políticos.  

 

Estaremos encaminándonos a nuestra Moderna Restauración en el momento en que los sectores de poder dejen de hablarle mentiras al incauto puelo, y el beneficio del cacareado crecimiento económico no sólo sirva para acrecentar la diferencia social, sino que se refleje en bienestar del nivel de vida cada uno de los dominicanos.

 

Sentiremos que estamos inmersos en una Nueva Restauración cuando una Crisis Sanitaria deje de ser un jugoso negocio en beneficio de grupos apandillados desde los gobiernos, y que a pesar de que por mucho tiempo se nos ha vendido la idea de que estamos en la "Era Digital" no sabemos cómo iniciar un año escolar por falta de preparación del recurso humano docente y la falta de plataformas adecuadas.

 

Siento vergüenza de que hace cuarentiocho años que mí padre cursó desde cuarto grado de la primaria hasta el octavo por la Escuela Radiofónica de Radio Santa María y hoy, luego de gastar tanto dinero en una llamada "Ciudad Digital" estemos hablando de involucionar hacia aquel método nueva vez. Se ha puesto en evidencia la gran brecha digital y más aún, que en República Dominicana vivimos dentro de la "Era Digital" con dirigentes y docentes análogos.

 

Me queda claro que estaremos disfrutando de una Nueva Restauración, cuando el grupo que maneja el poder en determinado momento deje de actuar de forma anti-ética para manipular los resultados electorales (falta de moral y de institucionalidad), y que por sobre todas las cosas los Presidentes entiendan que son servidores públicos; pero que por sobre todo, como primero entre sus iguales deben ser ejemplo.

 

Como Dominicano, espero nunca jamás ver el feo espectáculo de un presidente rehuír a su responsabilidad de asistir a la entrega de la banda Presidencial en un cambio de mando.  Pero más importante es, que nuestro pueblo no olvide y mantenga viva esa acción en su cerebro.

 

ROQUE J. DE LEÓN B. (MAE)

DIPLOMADO EN COMUNICACIÓN SOCIAL INTEGRAL

MIEMBRO DEL: SNTP Y SINLOPP