La Desaparición Física de un Maestro(a) no Apaga las Hogueras que Encendió.

Ultima Actualización: lunes, 15 de febrero de 2021. Por: Roque de León B

Por: Roque J. de León B.

Así como la tierra es importante y por momento imprescindible para los seres vivos, muy en  especial para los humanos por las riquezas que les proporciona; de igual manera los Maestros (as) por las virtudes que les adornan son imperecederos en la memoria de la sociedad,  por la capacidad de transformar a sus semejantes al enseñarlos a pensar.

 

Hay términos o expresiones que en teoría pretenden igualarse al de maestro, como son los de Profesor y Docente, pero en la práctica existen marcadas diferencias entre ellos; el primero tiene su accionar basado en la ética y se forma para transformar personas en edades especiales (3 a 17 años) de igual manera de diferentes áreas, lo hace por vocación. Los profesores y docentes forman personas a partir de la adolescencia y además a nivel superior. Estos pueden verlo como un modo de vida.

 

En países como el nuestro no hay programas, mecanismos ni escuelas especializadas para la captación y el desarrollo de personas con los  talentos requeridos para ser maestros; por eso los bajos niveles de desempeño y rendimiento detectados en el área  educativa siempre que los organismos competentes hacen las mediciones mandatorias y de rigor, cada determinado tiempo.

 

Para que eso cambie en República Dominicana, es necesario identificar los recursos humanos procedentes de familias que tienen su base de educación en los valores positivos, y que responden a los perfiles desarrollables como modelos en la formación de personas que valoran las ideas creativas y productivas, como la vía potencial para cambiar el estado de cosas que frenan la ejecución de políticas que nos guíen al crecimiento integral de nuestra sociedad.

 

Cuando captamos y desarrollemos el personal ideal para continuar el legado del maestro, debemos garantizar un ambiente docente idóneo, una condición y calidad de vida que le brinde tranquilidad y seguridad en el tiempo, para él y los suyos.

 

En nuestro modelo educativo los maestros trabajan doble tanda y cuando son pensionados van a vender sus conocimientos al sector privado para poder sobrevivir; eso es injusto, si analizamos que ellos forman las personas que con su conocimiento hacen crecer y sostienen el país.

 

De igual modo, hay que crear un sistema de pensión automático que le permita al maestro un retiro en edad para disfrutar su familia, pues sabido es por todos que por el deterioro de la circulación sanguínea de estos, debido a su sistema de trabajo no comparten ni disfrutan con sus seres queridos.

 

Como si no fuera suficiente, su seguro de salud que era excelente y que les cubría el cien por ciento de sus medicamentos ha ido degradando su cobertura y eliminando sustancias, ya es deficiente, al igual que cualquier otro del sistema.

 

Con tristeza observamos en nuestra provincia la desaparición física de valiosos maestros y maestras, muchos (as) aunque pensionados del sector educativo público aún en plenas labores en el sector privado, eso es criminal.

 

Tiene que ser revisado el régimen salarial  vigente para los maestros, de él depende el monto de la pensión recibida por estos en la etapa final de su vida donde mantienen una  alimentición especial y de igual manera, la cantidad de medicamentos consumida es exhorbitante, ya que la mayoría de ellos terminan padeciendo de: mala circulación arterial, hipertensión y diabetes.

 

La sociedad no puede seguir de espaldas a una situación que nos compete a todos, merecemos tener los maestros idóneos que nos garanticen un excelente Sistema Educativo, pero hay que garantizarles salud preventiva y un nivel de vida digno; ellos tienen la responsabilidad de forjar el pensamiento crítico que necesitamos para contar con mejores ciudadanos.

 

Por las hogueras encendidas con su conocimiento, responsabilidad y legado los verdaderos maestros siempre permanecen vivos en los que apreciamos y valoramos sus esfuerzos por construir una sociedad más armoniosa.

 

ROQUE J. DE LEÓN B. (MAE)

DIPLOMADO EN TECNICAS DE COMUNICACIÓN SOCIAL INTEGRAL

MIEMBRO DEL: SNTP Y SINLOPP