Se entiende que, en todas las provincias el municipio
cabecera es el que mantiene no solo un crecimiento poblacional sino, el de más actividad
económica y en constante desarrollo.
En nuestro caso el municipio de San Felipe de Puerto Plata,
encontramos diferentes Direcciones del gobierno central y otras instituciones.
Turismo, Educación, sede de la gobernación provincial, altos
tribunales judiciales, Oficinas centrales de la Junta Municipal Electoral, un
Obispado, tenemos Cámara de Comercio, Clúster Turístico, diferentes
Asociaciones, Clubes de servicios y otras instituciones que apuestan por
nuestro desarrollo.
Lo mismo puede decirse, de las distintas emisoras de radio y
canales de televisión por cable, medios impresos y digitales con decenas de
periodistas y comunicadores que luchan por el bienestar de los puertoplateños.
En este municipio cabecera, residen una mayor parte de nuestros legisladores nacionales.
Nos desilusiona eso sí,
ver muestra de tanta indiferencia o inercia ante situaciones por la que
atraviesan los residentes de otros municipios con sus propias carencias y
penurias.
Solo un vistazo por algunos de nuestros municipios.
Montellano: el más cercano a nosotros languidece como enfermo sin esperanzas,
luego de colapsar todos los intentos hechos hasta ahora para rehabilitar el
Ingenio.
Sosúa: con su inseguridad y playas arrabalizadas.
Imbert, Guananico, Luperón, La Isabela, Altamira y Los
Hidalgos: Sus ríos se mueren y se tornan escasas las fuentes de trabajo, corte
indiscriminado de árboles, cientos de kilómetros abandonados de caminos
vecinales, la falta de un puente sobre el río Unijica que uniría La Isabela con
El Castillo, Luperón, el desastre de la carretera Imbert- Guananico, tantas
veces anunciada su reconstrucción.
A esas autoridades de esos municipios (que también las hay),
a todos los residentes en cada uno de ellos, tenemos que hacerles ver y que
puedan creernos, que Puerto Plata, no es tan solo el municipio cabecera.
Que sus luchas son nuestras y que juntos anhelamos un
presente y futuro más promisorios.