En cualquier país donde crecimiento y desarrollo integral son Prioridad Nacional todos los buenos ciudadanos deben centrar su atención en identificar cuáles son los proyectos necesarios para enfocarse en su oportuna y exitosa ejecución.
En sociedades como la nuestra penosamente sucede lo contrario, los grupos políticos que por mandato Constitucional acceden al control de las Instituciones del Estado en cada Período Electoral, traen sus propios proyectos y programas, abandonando y dejando a la deriva los ya existentes.
Eso sucede porque muchas obras no se inician por ser prioritarias y de utilidad para los potenciales usuarios sino porque complacen el ego e intereses particulares de diferentes grupos de poder Políticos y Económicos.
Hace falta que quienes pagan los impuestos en nuestro país con los que por diversas vías se han hecho millonarias personas y familias que nunca soñaron serlo, exijan que se hagan cumplir las Leyes, reglamentos, manuales y métodos para seleccionar las obras prioritarias y de real utilidad para el colectivo.
Esa falta de seguimiento a un método eficiente para cumplir con tan delicada misión es lo que hace de las solicitudes, construcción y paralización de las obras una herramienta permanente de campaña electoral, tanto para los que manejan los bienes del Estado al igual que para la oposición.
Los primeros porque se ha hecho tradición que al iniciar y entregar sus ejecutorias en las diferentes comunidades se promueven al igual que las presentan como logros en las sub-siguientes campañas electorales y, los segundos se convierten en críticos permanentes con razón o no por las obras paralizadas así como por las que no se inician, que ellos tampoco lo hicieron.
Estas diputas irracionales entre grupos de intereses, no dejan que la gente común reflexione sobre cuáles son sus reales necesidades porque se resaltan las que convienen y benefician políticamente a quienes las promueven para sus beneficios particulares.
En Puerto Plata por ejemplo, muy pocos destacan que hay que concluir: el anexo que inició este gobierno al Hogar de Adultos Mayores San Antonio María Claret de Puerto Plata (paralizado hace mucho tiempo por falta de los recursos), el pórtico de La Respetable Logia Restauración No. 11, el estadio José Briceño; pero sí vemos que por puro populismo hacen filas con banderas en mano para tomarse una foto en el puente de Cangrejos y subirla a las redes o entregársela a algún comunicador para que le haga promoción y, pregunto a esos mismos; dónde estaban hace veinte y tantos de años en los que se incubó esa triste y dolorosa situación para todos?
Debemos observar y auto-conscienciarnos para poder identificar a quienes estando en el manejo de las instituciones del Estado intentan tomarnos el pelo pero también, a aquellos que en su oportunidad han estado en esa misma posición y hoy no sólo nos toman el pelo sino que intentan nublarnos el cerebro queriendo hacerse los graciosos ante situaciones que pudieron solucionar y no lo hicieron; bastaría mencionar el tan cacareado puente de Cangrejos, los puentes de la parte Oeste de la provincia de Puerto Plata de los que sus piezas no se pudrieron porque eran de acero; ponga usted los demás...
Debemos abrir nuestra razón para que las promesas incumplidas por todos no sean las mismas que utilicen para seguirse promocionando unos y otros, es tiempo de hacernos responsables de forjar un presente de soluciones así como asegurarnos de legar un futuro mucho más promisorio.