El mundo inicia nueva vida después del covid-19

Ultima Actualización: domingo, 24 de mayo de 2020. Por: Artículo Invitado

Por: Roque De León

Después de cinco meses de rodillas el mundo intenta ponerse de pies luego que en el mes de diciembre del año 2019 por primera vez se detectó el COVID-19 en la Ciudad de Wuhan, Capital de la Provincia de Hubei, en la República Popular China. 

 

Para el 11 de marzo del 2020, lo que se inició como una epidemia, debido al trato inapropiado y retrasado logró contaminar una gran cantidad de personas de diferentes países, obligando a la Organización Mundial de la Salud (OMS) a declararla pandemia de la humanidad.

 

Al día de hoy de acuerdo a las estadísticas de las organizaciones de la salud, hay sobre 5   millones de personas infectadas y más de 333,000 fallecidos en 213 países.  

Los más afectados son: Estados Unidos, Brasil, Rusia, Reino Unido y España.

 

Este Virus que se trasmite a través de pequeñas gotas de saliva de persona a persona, o tocando superficies dónde se depositen estas al hablar, ha mantenido el mundo cerrado por más de dos meses.

 

A la fecha después de muchas especulaciones en relación a la invención de una vacuna para su prevención y el invento en el uso de medicamentos indicados para otras afecciones o condiciones de salud; hay que admitir que lo único cierto que tenemos es mantener la disciplina en la distancia, exagerar con la higiene, no tocarnos la cara sin antes limpiarnos las manos y fortalecer el Sistema Inmunológico.

 

Después de un largo encierro  personal y comercial, parte de la humanidad ha entendido que con más de 40 millones de empleos perdidos esa situación es insostenible para las economías de las familias y el comercio en general, originando presiones sociales en diferentes latitudes que obligan a aperturar el comercio de forma gradual.  

Nuestro país no es la excepción.

 

Esa apertura sorprende a muchos ya que jugamos al quédate en casa y no nos educamos para el regreso con protocolos definidos, garantistas de la tranquilidad que merece la ciudadanía.

 

De una cosa debemos estar claros al regresar a la Nueva Vida, las sociedades no pueden ser apáticas y colocarse de espaldas ante los acontecimientos que nos afectan, con ello dejamos campo abierto a oportunistas que además de los manejos inadecuados por falta de planes serios, consensuados y bien definidos; asechan para de manera anti-ética obtener beneficios políticos y económicos del dolor y la miseria de la mayoría.

 

Al final no conocemos qué hace más daño, el Virus o los desalmados que cometen esas y otras acciones?

 

ROQUE J. DE LEÓN B. (MAE)

DIPLOMADO EN COMUNICACIÓN SOCIAL INTEGRAL

MIEMBRO DE:  SNTP Y SINLOPP